Marina Saez Castellanos

Excelente ginecóloga, explica de una forma clara y con palabras que cualquier persona puede entender.

Hay un detalle que tengo que comentar, el seguro de gastos medicos menores me solicitó una receta con mi nombre diagnóstico y plan de tratamiento, Yo le pedí a la doctora que me extendiera una receta con esos datos. Se negó rotundamente, no me expidió otra receta nada más porque no quiso.

Como profesional es muy buena eso no está a discusión, PERO también es intransigente y hasta grosera.

Excelente trato de la doctora, es muy profesional, está muy bien preparada , es mi ginecóloga desde hace más de 30 años y todo lo que puedo opinar es que es una gran persona y excelente trato como profesiomista. Me trató en embarazo de muy alto riesgo y gracias a su tratamiento hoy mi hija tiene 16 años y es una mujercita sana y hermosa que también es tratada por la Dra, Sáez en todos estos años siempre ha sido muy buena diagnosticandonos así como.a mi mamá y muchas amigas que también van con el

Nada, me gusta desde la entrada de su consultorio.

Excelente doctora. No tengo más q palabras para agradecer el profesionalismo y atención durante mi embarazo, fue de alto riesgo y en todo momento estuvo conmigo. Altamente recomendable

Pues yo soy paciente de la misma doctora desde hace 28 años y aseguro que es además de una excelente ginecóloga, una persona muy responsable,muy profesional y de una gran calidad humana.
Ella a mí y a otras mujeres de mi familia siempre nos ha brindado buena atención,aún en días y horarios tan difíciles como Navidad, festivos, sin fallarnos nunca.Sacrificando siempre su tiempo y actividades por sus pacientes.

Lamentablemente no tengo puntos positivos en mi experiencia con la Dra. Marina Castellanos.

Perdí un bebé a las 12 semanas de embarazo. La Dra. Castellanos era mi ginecologa y me programó un legrado. Yo estaba triste, asustada, con dolores y sangrando. El día del legrado llegó y yo con todo mi dolor físico y emocional fui al hospital en donde me atenderían. Ya ahí me dijeron en la recepción que la Dra. no iba a llegar, así, sin más explicaciones, sin ningún doctor suplente. Ahí estaba yo, sangrando y sin saber que hacer. Ella nunca llegó. Imperdonable falta de ética y ca